"¿Sabes quién soy?", preguntaba el jefe infiltrado de Heladerías L'Antiga a cada uno de los empleados con los que trabajó durante los cuatro días que duró su experiencia laboral entre sus trabajadores. Es el día de las revelaciones, pero a una de ellas no hace falta que le diga absolutamente nada, o eso se cree. Ruth, la pastelera, cayó pronto en la cuenta de quién era y no le hicieron falta más explicaciones. Solo tuvo que echarle un vistazo para saber o creer saber qué era lo que estaba ocurriendo. No hubo necesidad de mediar más palabras que las tres de rigor.
"¿Sabes quién soy?", le preguntó también a ella. "Por supuesto, sus ojos no se olvidan. Jacobo". Pero ahí se equivocaba la pastelera.
El resto de sus compañeros fueron respondiendo negativamente a esta cuestión, no reconociendo en ese hombre tan elegante y serio al aprendiz que había estado compartiendo espacio de trabajo con ellos. "Esta semana he sido Jacobo, un aristócrata, pero realmente soy Sergio Rodilla. Soy el director de marketing, comunicación y expansión de L'Antiga Valenciana y Mamma Luisa", confesaba.
"Soy tu jefe", les dijo a cada uno de sus trabajadores, que no podían creerse lo que estaba ocurriendo ante sus ojos.
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(*) Desde laSexta.com estamos recuperando los mejores momentos de la hemeroteca de El Jefe Infiltrado.
Hemeroteca
Una empleada planta cara a su jefe (no) infiltrado el día de revelaciones: "Mi tarta estaba bien hecha y la tuya, no"
El jefe de L'Antiga Valenciana se desprendía por fin de la falsa identidad que usó durante la infiltración en la empresa y desveló quien era realmente a sus empleados. A alguno de ellos no le sentó demasiado bien el engaño.