El jefe infiltrado habla con Pepe, el mensajero veterano, quien le dijo que las normas no tenían sentido o no estaban pensadas desde el punto de vista de los mensajeros. Por ello, el jefe infiltrado está trabajando para cambiarlas y quiere que le informe de primera mano para hacerles las cosas más fáciles. Guillermo le regala un manos libres para el coche y le pide “que sigas trabajando igual pero que le dediques más tiempo a su familia”. Para ayudarle le regala unas entradas para ver el Real Madrid- Barça en el palco VIP del Santiago Bernabeu con su hijo y un viaje de un mes por el centro de Europa para que esté más tiempo con su mujer.
Guillermo se ve las caras con Nuria, la directora exigente a la que le pide que vigile sus formas. Sin embrago, como aprendió mucho con ella, quiere que la directora de la franquicia trabaje directamente con él realizando un manual de buenas prácticas de cómo trabajar en la franquicia. Además MRW le regala durante un año sesiones de spa de lujo para que se relaje.
El director general adjunto de MRW habla con Wilfred, el exportero del Rayo Vallecano y de la selección de Nigeria y que ahora es mozo en la empresa. Ha tenido una vida muy dura y ha sabido levantarse siempre y ser un ejemplo de trabajo dentro de la plataforma. Por ello, como le gustaría ser entrenador de porteros le paga el primer nivel para que pueda estudiar y serlo, además de pagarle un viaje a Nigeria para que vea a sus hijos.
Guillermo le pide a Pablo que tiene que llamar más la atención y que cuando vea una incidencia decirle al mensajero que las cosas no se hacen así. El jefe le pide que le ayude a mejorar el servicio y como ama tanto como él a los animales, MRW le paga una formación en aves rapaces.
Como Marco está muy preocupado por los despidos, Guillermo le asegura que todos los de arriba se están esforzando para que no se vaya ningún cliente y no tengan que despedir a nadie. Para el jefe ha sido un ejemplo, sabiendo la enfermedad de su hijo, el optimismo que transmitía. Por ello, MRW le ayuda económicamente durante la enfermedad pagando los gastos médicos. Además, le comenta que le gustaría que el próximo proyecto de la empresa sea donar una cantidad de dinero a la investigación a la enfermedad de su hijo, siendo la imagen de él, su hijo.
Hemeroteca
El jefe infiltrado presencia cómo una camarera intenta cobrar de más a unos clientes mediante tarifas inventadas
Dado Lima, el jefe de Toro Burger, no daba crédito a lo que sus oídos escuchaban. "Coste extra de 3 euros", decía su camarera a unos clientes. Algo, que no era cierto y él sabía... Sin embargo, tenía que callar para no delatarse.