Expertos consultados por El Objetivo analizan cuánto riesgo supone participar en las elecciones que se celebrarán en Cataluña el próximo fin de semana: desde asistir a un mitin hasta acudir a votar.
Pilar Serrano, epidemióloga, explica que ir a un mitin es una actividad en la que podría haber aglomeración de personas. Pero si se tiene en cuenta la distancia de seguridad y las personas se colocan en una misma dirección, el riesgo sería moderado. Concha Bonet, pediatra y doctora en Medicina, repara en que "cuanto más alta es la voz, cuanto más se grita o si bajamos la mascarilla se pueden generar aerosoles e inducir mas contagios".
En cuanto a la situación de formar parte de una mesa electoral, los expertos recomiendan en que se deberán cambiar la mascarilla cada cuatro horas, situarse todos mirando en la misma dirección y preferiblemente poner una mampara que los separe de las personas que vayan a votar. No obstante, y teniendo en cuenta que se atiende al publico durante muchas horas, Daniel Troncoso, médico preventivista, explica que "las interacciones de bajo riesgo de forma reiterada terminan formando un riesgo alto".
Por otro lado, en ir al votar el riego puede ser bajo si se gestiona bien: si no se dan aglomeraciones, hay un flujo de entrada y salida, barreras físicas que separen a los interlocutores y uso de mascarilla y gel hidroalcohólico.
Trasladar a la población en zonas de riesgo, una opción
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