"Necesitamos estar presentes en Venezuela. Algunos países tienen menos intereses que nosotros, pero nosotros tenemos muchos intereses humanos y sociales", afirma Josep Borrell que recuerda cómo fue el proceso hasta el día en el el Gobierno reconoció a Juan Guadió como presidente de Venezuela.

"Maduro tenía una legitimidad democrática que expiraba el 10 de enero porque había sido elegido en unas elecciones que nosotros no reconocíamos. A partir de ese día las cosas cambian y la mayoría de los países de la Unión Europea, España entre ellos, decidió ser consecuente con el hecho de que no reconocía las elecciones que habían llevado al señor Maduro a la presidencia y reconocía a Guaidó como presidente", manifiesta el ministro de Exteriores.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez
España reconoce oficialmente a Juan Guaidó como presidente de VenezuelaEFE | Europa Press

El ministro Borrell califica la situación en Venezuela de "atípica". "Probablemente cuando se inició el proceso, y alguien estaba detrás de él, no se pensó que Maduro iba a demostrar esta resiliencia", señala Josep Borrell, a lo que Ana Pastor le pregunta si con "ese alguien" se refiere a Donald Trump.

"No me cabe duda de que EEUU ha estado propiciando lo que ha estado ocurriendo en Venezuela desde el 10 de enero", asegura el ministro de Exteriores.

En relación a cómo ha afectado la crisis de Venezuela a España, Borrell dice que "se ha convertido en una cuestión de política interior". "Un día el PP me llama chavista, no sé por qué, y otro dáa ERC me llama esbirro de Trump. Vamos a ver, las dos cosas a la vez no las puedo ser", declara Borrell, que encabezará la lista del PSOE en las europeas".

Sobre si cree que en Venezuela pueda llegar a una intervención armada, el ministro responde: "Espero que no, aunque, como alguien dice, 'todas las soluciones están sobre la mesa'". Sin embargo, Borrell defiende que "las operaciones militares para imponer la democracia nunca han funcionado".

"Nunca un Ejército invasor ha instalado la libertad y la democracia en un país", asegura el portavoz de Exteriores del Gobierno que insiste en que "una solución que pase por una intervención militar extranjera no es una solución y como no lo es, no se debe aplicar".