Leandro Álvarez Rey, historiador experto en la España contemporánea, señala que "Queipo de Llano supo descubrir un arma que infundía terror en sus adversarios, y eran sus charlas". En ellas, el general franquista llegó a hacer indignantes declaraciones como estas: "Que vayan preparando las mujeres de los rojos sus mantones de luto; yo os autorizo a matar como a perros a todo aquel que se resista a vosotros".

"El lenguaje era tan soez que ni siquiera los periódicos de derechas de la zona nacional se atrevían a reproducirlo", indica el historiador. "Nuestros valientes legionarios y regulares han enseñado a los cobardes de los rojos lo que significa ser un hombre. Y, de paso, también a las mujeres. Después de todo, estas comunistas y anarquistas se lo merecen. ¿No han estado jugando al amor libre? Ahora por lo menos sabrán lo que son hombres de verdad y no milicianos maricones . No se van a librar por mucho que forcejeen y pataleen", afirmó Queipo de Llano en otra intervención.