La revelación del dueño de un supuesto bar ilegal en la Cañada Real: "Tuve una explotación porcina y también un club de alterne"

En un programa de Equipo de Investigación de 2021, se revela la economía sumergida en la Cañada Real, donde, a lo largo de los 14 kilómetros del barrio, se habían contabilizado hasta 200 negocios. Los arrendamientos irregulares representaban solo una pequeña parte de esta trama. Había chatarrerías, carpinterías, tiendas de ultramarinos, talleres de coches y tres bares.

En el reportaje, habla Juanjo Escribano, propietario de uno de los bares. "Aparte de habitar la Cañada Real, ha montado su propio negocio", señala la periodista. Sin embargo, Escribano precisa: "Esto podría ser un bar. Aquí yo podría tener una actividad económica. En este caso, no tengo actividad económica sobre este local", a pesar de que detrás de él se ven barriles de cerveza y bebidas. La única licencia que posee el establecimiento es la de las máquinas tragaperras.

Escribano también menciona otros negocios que supo tener a su nombre: "Recogida de sacos, otros bares y otras cosas por ahí. Espero que no los descubran mucho los del Ayuntamiento, porque me están haciendo la vida imposible". Además, revela que ha tenido otros negocios calificados como ilegales: "Tuve una explotación porcina y también un club de alterne en la zona". Incluso fue propietario de un vertedero. "Yo no considero nada ilegal. Contra mí hay muchas denuncias. Dicen que hago fiestas ilegales, pero para mí son reuniones", afirma.

Entre las denuncias, Escribano comenta que una de ellas es por haber realizado 460 enganches ilegales a la electricidad hace 30 años, aunque no se arrepiente: "Lo volvería a hacer porque lo que están haciendo ellos es una ilegalidad".

*El contenido al que hace referencia la información forma parte de un programa de Equipo de Investigación de 2021.