El escándalo de los bebés robados se produjo en plena democracia. Era el año 1982, Franco había muerto años atrás, pero curas y monjas como Sor María ejercían aún una gran influencia en la democracia española.
Equipo de Investigación se desplazó en 2012 a León en busca de Sor María, la primera imputada por este caso. Allí, al llegar encontraron a uno de los sobrinos de la religiosa, que evitaba hablar ante las cámaras. Sin embargo, un vecino de Valderrueda, su pueblo natal, confesó al programa que ya había insistido a una mujer para dar en adopción a su hija.
"Una chica tuvo una hija, fue seis o siete veces a que le diera la hija para dársela a un matrimonio de Santander, porque era hija de soltera. Se la iba a regalar, bueno, regalar entre comillas", expresó.