En una escuela de Israel, decenas de estudiantes rodearon a una niña árabe, gritándole: "Tu aldea debería arder". Tras ello, la menor fue expulsada del colegio. Este hecho ha captado la atención de la editorial del periódico 'Haaretz', que advierte sobre las prácticas mafiosas que se están inculcando entre los jóvenes.

El artículo subraya la creciente preocupación por la normalización de mensajes de odio en la sociedad israelí, que se propagan no solo a través de las redes sociales, sino también desde plataformas de televisión. Un canal en particular, el Canal 14, ha sido señalado por promover abiertamente el genocidio y la comisión de crímenes de guerra contra los palestinos. Desde este medio, se han emitido más de 50 declaraciones que abogan por la destrucción total de Gaza, con presentadores y analistas que no dudan en utilizar un lenguaje brutal y deshumanizante.

Entre las afirmaciones más impactantes, un analista declaró: "Una de las cosas que me ayuda a dormir es ver todo tipo de edificios volando por el aire en Gaza. Vamos a tener más. Destruye lo más posible, así que no tendrán a dónde volver". En otro momento, sugirió la utilización de una bomba nuclear en Líbano. Esta retórica extremista, presentada sin tapujos, ha llevado a que organizaciones humanitarias pidan una investigación penal por la deshumanización de la población palestina.

Durante meses, el canal ha mantenido un contador en su sitio web que registra a los "terroristas eliminados", utilizando como referencia el número de palestinos muertos, una cifra proporcionada por el Ministerio de Sanidad de Gaza. Este tipo de deshumanización alimenta un clima de odio que, como señala 'Haaretz', está transformando las dinámicas sociales y culturales en Israel, dejando a las nuevas generaciones sumidas en una atmósfera de intolerancia y violencia.