Pedro Sánchez augura una recuperación económica tras el COVID optimista. De hecho, ha asegurado que ya está "superando todas las expectativas que podría tener el Banco de España".
Palabras que llevan a la positividad. Pero, ¿qué nos dicen los indicadores económicos? En laSexta Clave hemos querido analizar la evolución que tienen que seguir estos medidores en los próximos meses para confirmar que vamos en el buen camino.
Para ello, hemos analizado los seis indicadores que nos darán las claves. El primero, tal y como ha indicado el propio presidente del Gobierno, es el PIB. A éste le sigue el empleo, los ERTE, el Indicador de Precios al Consumo, el propio consumo y la deuda pública.
El PIB es el indicador por excelencia. Es el termómetro de la salud de una economía y, actualmente, está en números rojos. Sin embargo, ya muestra los principios de recuperación: de abril a junio hemos crecido un 2,8%, aunque haría falta un 6%, según los expertos, para que reflejara una recuperación óptima.
El empleo también ha mejorado. Según los datos de la EPA, el paro ha bajado en 110.000 personas hasta situarse en el 15,26% en el segundo trimestre de 2021, es justo el límite que sitúan los expertos de una economía saludable. En los próximos meses, por tanto, no se debería subir de esa cifra.
El tercer indicativo son los ERTE. Se trata de otro indicador fundamental, ya que constituyen el mecanismo que ha permitido que no se haya destruido tanto empleo como en otras crisis. Ahora mismo hay 340.000 personas en ERTE y para otoño debería bajar, según economistas, hasta los 250.000. Superar esta cifra implicaría que muchas empresas no están viendo una situación económica suficientemente buena como para recuperar a sus empleados.
Los precios suponen otro indicativo clave. Cuando una economía se encuentra en recuperación tienden a subir, y eso es exactamente lo que está pasando en España, aunque algunos expertos consideran que es un ascenso temporal.
El IPC en julio se ha situado en el 2,9 en España, aunque comparado con otras potencias de la eurozona se situaría en el 2,2. Los expertos apuntan a un crecimiento controlado, de entorno al 2%, según el BCE, ya que en caso de seguir creciendo puede afectar al consumo y, en el caso español, también a las pensiones.
El consumo es el indicador con los datos más esperanzadores en nuestro país. En el segundo trimestre de 2021 creció un 6,6% en los hogares. Para que se hable de recuperación económica tendría que crecer entorno al 7% durante este 2021. Por último, la deuda pública está ahora en el 125%, y no debe subir en los próximos meses del 120%.
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Tras perder casi un 11% del PIB durante 2020, se puede decir que España está en recuperación económica, ya que se espera que este año crezca entorno a un 6,5%. Además, el FMI sitúa a España como uno de los países con mayor crecimiento en 2022, augurando una suma del 5,8%. No obstante, los próximos meses serán clave para consolidar esta tendencia.
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