El Papa Francisco mueve fichas en la iglesia católica española en la misma semana en la que la vicepresidenta Yolanda Díaz visitará El Vaticano. José Ignacio Munilla ha sido relegado como obispo de San Sebastián después de 10 años de polémicas. LaSexta Clave ha hecho un repaso a las posiciones ultraconservadoras de este religioso que resultan no estar en consonancia con el discurso del actual Papa.

José Ignacio Munilla fue en su momento el obispo más joven de España cuando le nombraron en 2006 a los 44 años. Pero ni mucho menos eso lo convirtió en el más moderno, todo lo contrario. Sus ideas están en el extremo opuesto, en el ala más conservadora de la iglesia católica.

Por ejemplo, el aborto. Si no parece extraño que un obispo se posicione en contra del derecho aborto, sí que este lo califique de "genocidio femenino". Y no solo eso, sino que considera que los hospitales en los que se practican abortos "se sacrifican" a niños; y que la decisión no está entre ser madre o no serlo, sino entre "ser madre de un hijo muerto o ser madre de un hijo vivo".

Al obispo le gusta además hablar del "feminismo sano", que es básicamente el que él, un hombre, defiende para la mujer. Sin anticonceptivos, ni aborto, ni divorcio y (muy importante) con monogamia. Lo demás le parece feminismo radical.

Munilla no se limita a la expresión oral en sus homilías, sino que también emplea tiempo en la palabra escrita, ha publicado dos libros. En 'Sexo con alma y cuerpo' dice entre otras cosas que la homosexualidad es un trastorno. Una enfermedad, de la que por cierto, él asegura que ha ayudado a tres personas a curarse.