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Trump, el (no) negociador de conflictos: Ucrania respira por 30 días, pero las promesas de paz siguen sin cumplirse

Entre líneas Trump ha utilizado su estilo agresivo para frenar los bombardeos rusos y mediar en el conflicto de Gaza, pero sus objetivos de resolver la guerra en "24 horas" y garantizar la paz siguen fuera de su alcance.

Trump, el (no) negociador de conflictos: Ucrania respira por 30 días, pero las promesas de paz siguen sin cumplirse

En lo que podría considerarse su mayor logro en el conflicto ucraniano, Donald Trump ha conseguido que Vladímir Putin detenga los bombardeos a las centrales eléctricas de Ucrania durante 30 días, además de negociar un intercambio de prisioneros entre ambos países. No obstante, a pesar de estos avances, Trump no ha cumplido con su promesa de poner fin a la guerra "en 24 horas".

Un año después de su elección, sigue sin resolver el conflicto. Su promesa de solucionarlo antes de asumir la presidencia y en un plazo de un día entero ha quedado en el aire. En una conferencia, Trump defendió que sus declaraciones sobre las "24 horas" fueron una forma sarcástica de expresar su intención de resolverlo.

Por otro lado, su influencia en Gaza ha sido menos efectiva. Trump había prometido un "infierno" para Hamás si no liberaban a los rehenes antes del 20 de enero, pero no cumplió con su amenaza. A pesar de un alto el fuego y un intercambio de prisioneros que parecía producto de sus gestiones, Netanyahu volvió a intensificar los bombardeos en Gaza, matando a 400 palestinos.

Aunque la prensa estadounidense afirma que Trump dio luz verde a los ataques, su interés parece estar más en fortalecer a Israel y eliminar a Hamás que en garantizar la paz en la región.

En el frente económico, Trump sigue jugando con los aranceles, particularmente contra México y Canadá, con el objetivo de frenar la inmigración ilegal y el tráfico de drogas. México ha respondido enviando 10.000 policías a su frontera norte y extraditando a varios narcotraficantes, mientras que Canadá ha anunciado varias reformas y políticas para cumplir con las demandas del presidente estadounidense.

Sin embargo, las medidas que Trump implementa también incluyen a Europa y China, lo que genera incertidumbre sobre sus objetivos a largo plazo. Los aranceles impuestos pueden lograr que las empresas regresen a EEUU y hacer que los productos nacionales sean más baratos que los importados, pero también podría tener el efecto contrario: elevar los costos de producción e incrementar el precio de los productos para el consumidor estadounidense.

En cuanto al Canal de Panamá, Trump ha logrado que China venda sus puertos a empresas estadounidenses, aunque China ha advertido a la parte interesada que no apresure la transacción. Trump, conocido por su estilo negociador basado en la presión y las amenazas, está dispuesto a seguir presionando para cumplir con sus objetivos económicos y geopolíticos. Sin embargo, el futuro de estas negociaciones aún está por verse.