Seidú Diop muestra a Jordi Évole un asentamiento, llamado 'Salvador' en Lepe, Huelva, en el que viven únicamente inmigrantes subsaharianos y magrebíes. "Llevamos un montón de años así, somos trabajadores agrícolas que estamos recogiendo la fruta roja".
Durante sus primeros años en España, este joven senegalés también vivió durante cuatro meses en uno de estos asentamientos. "Tuve un poco de suerte porque me salí de allí lo antes posible. Pero es muy difícil porque no hay vivienda", explica Seidú.
Después de pasar por esta experiencia, Seidú se hizo voluntario para ayudar a los que están llegando ahora y están pasando por lo que él mismo pasó. "Ahora ya sé lo que está pasando, ahora ya sé el sufrimiento de los que están en los asentamientos y me da mucho coraje, por eso estamos aquí", explica que el joven, que detalla que, con el apoyo de su asociación, con "una cisterna de agua potable", reparten agua en los asentamientos de lunes a viernes.
En febrero, un relator de la ONU visitó estos asentamientos y dijo que "las condiciones de los trabajadores migrantes que recogen la fresa en Huelva son peores que en un campo de refugiados". Jordi Évole pregunta a Seidú si, tras esta visita, el Gobierno ha tomado medidas.
"Aquí nada, cada vez es peor. Yo no he visto ninguna cosa que haya hecho el Gobierno aquí", explica Seidú, quien destaca que "el Gobierno y los administradores son conscientes" de cómo están viviendo.
"Ahora, en el sector terciario y secundario casi nadie ha ido a trabajar, ¿quién está trabajando actualmente? El sector primario está manejando ahora el país", destaca el joven, que recuerda que están "recogiendo la fruta, dando de comer a las autoridades, a la población española y a toda Europa": "Lo que estamos recogiendo sale de España y alimentamos toda Europa".
"¿Y por qué no nos pueden respetar?, ¿por qué no nos pueden valorar como ser humano?", se pregunta Seidú, que manda un mensaje al Gobierno: "Estamos pidiendo que regulen
la situación de los migrantes. Por favor, lo necesitamos y es un buen momento de hacerlo".
Otros momentos destacados
Por su parte, Vicky reparte alimentos de primera necesidad en Soria, uno de los municipios con más población mayor. La joven cuenta que se ha encontrado casos muy duros durante la crisis del coronavirus como "gente llorando muy preocupada por su futuro".
Preguntada por Évole sobre la actuación de la Administración, Vicky, al igual que Seidú, se muestra muy crítica: "La Administración ha llegado muy tarde y muy mal, aunque en algunos pueblos se ha organizado con Cruz Roja, pero no llegan".
Jordi Évole también habla con Roberto Saviano, quien desde que publicó 'Gomorra' en 2006, vive confinado para protegerse de la mafia. "La crisis del coronavirus puede llevar a un periodo muy peligroso de poder criminal en Europa", alerta y, además, destaca que "por miedo, podemos delegar nuestros derechos y convertir al Estado en una estructura autoritario".
Un encuentro entre amigos
Estopa sorprende a Albert Pla y Jordi Évole en mitad del bosque: "¿No habéis visto a un conejo blanco?"
Albert Pla comparte sus chocolatinas con cenizas de Pau Riba con David y José Muñoz, pasando un buen rato junto a Jordi Évole y Pepe, el conejo blanco que ha estado presente en este último programa de la temporada de 'Lo de Évole'.