La familia de Franco vuelven a enfrentarse a las instituciones, en esta ocasión porque la Xunta de Galicia les exige que abran al público la Casa Cornide de A Coruña, declarada Bien de Interés Cultural, lo que les obliga a permitir las visitas. Los descendientes del dictador se resisten porque aseguran que, de vez en cuando, viven allí.

Beatriz de Vicente asegura en el vídeo sobre estas líneas que "el proceso jurídico es muy interesante": "¿Dónde está ese paso mágico en el que un bien que es patrimonio de España pasa a ser un bien privado?", se pregunta la abogada.

Sobre si hay posibilidad alguna de que el pueblo recupere la Casa Cornide, se muestra "convencida de que sí", si bien asegura que "me deja absorta" las justificaciones de los Franco de que es un edificio habitado: "Se están agarrando a un clavo ardiendo", comenta Beatriz, que descarta que, con el foco mediático que hay ahora mismo, pudieran venderlo porque "sería un fraude de ley importante".