Puede parecer algo de ciencia ficción pero no es así: es posible que la solución a la calvicie esté más cerca de lo que pensamos gracias a los burros. Como cuenta Cristina Pardo, parece que estos animales tienen la clave para erradicar esta problemática en su sangre.
Como explica la periodista, unos veterinarios de una universidad sueca se han trasladado hasta Doñana para estudiar la sangre de Mortadelo, un pollino que, como cuenta Pardo, "es un animal genéticamente muy puro".
A través de esta sangre los científicos están estudiando cómo consiguen tanta fuerza en los pelos de las crines. En animal además de convertirse en objeto de estudio también es muy especial ya que, como explica la periodista, "trabaja habitualmente con los bomberos de Huelva".