Desde que se conociera la noticia de la salida de Pedro J. Ramírez del diario 'El Mundo' se han conocido multitud de reacciones por parte de colegas, rivales o analistas. En la charla de despedida de la redacción del periódico ha estado Rubén Amón, colaborador del diario, que ha señalado la charla de Ramírez con Bárcenas como el motivo de la hostilidad en las presiones gubernamentales.

Según Amón, el célebre director se ha tomado con sorpresa la noticia: "Él anoche pensaba que iba a seguir siendo el director del periódico". Al final, las presiones "del Gobierno y de la Casa Real", según ha reconocido Pedro J., han sido las grandes motivaciones para su cese. En ese sentido no tiene dudas: "Ha mencionado que Mariano Rajoy tiene un problema con él, Ramírez se ve como un objetivo del Gobierno".

Rubén Amón ha destacado que "la plantilla tiene un sentimiento de lealtad con el director", lo que ha provocado una atmósfera "de emoción" durante la despedida: "Nos ha dicho que ha recibido tres puñaladas: que no esté Javier Espinosa y que no sepamos nada de él, que no le dejen abanderar el 25 aniversario de 'El Mundo' y que no le dejen disfrutar de la trascendencia de la nueva dimensión digital del periódico, de la que él había sido pionero".

Lo que sí se ha querido asegurar es que el diario no va a sufrir grandes cambios. "Nos tranquiliza saber que Casimiro García Abadillo garantiza la continuidad de la línea editorial y, además, que no existe ninguna operación hostil de cambio accionarial", dice Amón.

Por último la propiedad ha dicho que se le sugirió irse, algo que según cuenta Amón, Ramírez ha negado rotundamente: "Ha dicho que de sugerírsele nada, pero también ha matizado que su idea es seguir escribiendo la carta de los domingos en el periódico mientras le dejen".