Antonio Meño quedó en coma vigil tras ser víctima de una negligencia médica a los 21 años. Desde entonces, su familia luchó por hacer justicia. En 1993, el anestesista, Francisco González fue condenado a pagar más de un millón de euros. Finalmente, y tras recurrir a la Audiencia, González fue absuelto.

Fue entonces cuando la familia de Antonio, y él mismo, acamparon frente al ministerio de Justicia para protestar. Un médico, tras ver la acampada, se ofreció a declarar a favor de la familia. En 2009, gracias a ese testimonio, el Supremo anula todas las sentencias y se pacta una indemnización de un millón de euros. Tras 23 años de lucha, Antonio Meño ha fallecido.

El abogado de la familia, Luis Bertelli, ha hablado en directo para 'Más Vale Tarde'. Para Bertelli, "ha sido la opinión pública la que ha hecho justicia por Antonio Meño". El abogado culpa a los jueces por mirar para otro lado y someter a la familia de Antonio a un auténtico calvario. "Tenemos una justicia que castiga a las víctimas más de lo que imaginamos", ha explicado Bertelli.