Atestado de la Guardia Civil
"Han dejado a una señora mayor sola": así denunció una camarera el abandono de la tía Isabel horas en un Vips
La Guardia Civil tomó declaración a varios empleados del restaurante donde Arancha Palomino y Luis Lorenzo dejaron sola a la anciana mientras pasaban el día en la Warner. Una de ellas llegó a denunciarlo en Twitter, donde publicó una foto.
El atestado de la Guardia Civil sobre la muerte de la tía Isabelapunta a un abandono intencionado y severo de la anciana por parte de su sobrina, Arancha Palomino, y Luis Lorenzo. Uno de los episodios con los que ilustran ese abandono se produjo el 17 de abril de 2021, cuando la tía Isabel llevaba apenas un mes en la casa de la pareja.
Ese día, acudieron a un centro comercial de Rivas-Vaciamadrid. Allí, según los testimonios recabados por la Guardia Civil, la anciana permaneció varias horas sola en un Vips, mientras el resto de la familia estaba en el parque Warner celebrando un cumpleaños.
Una de las empleadas del restaurante llegó a publicar una foto -recogida en el atestado y que puede verse en el vídeo sobre estas líneas- en Twitter, donde relató lo ocurrido, denunciando a través de las redes sociales que habían "dejado a una señora mayor sola" en el restaurante "desde las 12.30 hasta aprox 21.00". "La pobre diciendo que la habían dejado ahí porque la familia a cargo estaba en un cumpleaños", detallaba en ese hilo, publicado el 18 de abril de 2021.
En él, la empleada incidía en que la anciana "no podía orientarse" y en cómo su sobrina amenazó con denunciar a los camareros cuando finalmente apareció y estos le reprocharon haber dejado tantas horas sola a la anciana.
La Guardia Civil ha hablado con varios empleados del establecimiento, cuyos testimonios recoge el atestado al que ha tenido acceso laSexta: sus relatos coinciden en que la tía Isabel parecía desorientada y perdida y que los camareros permanecieron pendientes de ella durante toda la tarde, hasta que finalmente apareció su sobrina, que se enfrentó a ellos y quiso poner una reclamación cuando le echaron en cara haber abandonado a su tía, a quien se dirigió, a su vez, de malas formas, preguntándole a gritos si la trataba mal.
De los testimonios recogidos por los agentes se desprende, asimismo, que la anciana volvió al día siguiente al establecimiento. Algunas de las personas que hablaron con ella relataron cómo les dijo que quería volver a su pueblo.