Hasta el año 2010 Andorra era un paraíso fiscal. Los bancos del país no tenían la obligación de facilitar información sobre sus clientes. Pero ese año la cosa cambia, porque el gobierno andorrano firma un acuerdo de intercambio de información fiscal con España.

Y es entonces cuando, según publica ‘El Periódico’, AndBank pide a la familia Pujol que retire todo su dinero de la entidad. “La banca andorrana receló de la fortuna del clan Pujol”, titulaban en el diario catalán.

El origen del dinero de la familia generó dudas, sospechaban que no era limpio y los dueños  del banco no querían manchar su reputación. Así que deciden quitarse de encima la fortuna que los Pujol habían escondido en la entidad durante 34 años.

Al clan no le queda más remedio que moverla. Pero les cuesta y preguntan a varios bancos que se niegan a aceptar su dinero y es finalmente la Banca Privada de Andorra la que acoge cuatro millones de euros.

Sólo una pequeña cantidad del tesoro que la familia tendría escondido. Porque, según los informes remitidos a la Audiencia Nacional, el patrimonio oculto del clan Pujol podría estar cerca de los 2.000 millones de euros.

Según publica el diario ‘El Mundo’, la policía está investigando ahora si Pujol desvió parte de esos millones a su fundación, creada en 2005 para difundir el pensamiento político del expresident.