La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, se sincera en un portal gay donde afirma sentirse víctima de una persecución mediática por estar imputada en el ‘Caso Brugal’. “Yo ya soy una persona condenada”, destaca.

“Mi madre me dice que cuando lee la prensa y ve la televisión, parece que ha parido a la hija más corrupta de este país”, cuenta Castedo en referencia a la polémica surgida tras conocerse las conversaciones interceptadas con el empresario Enrique Ortiz. La alcaldesa ha aprovechado la entrevista para echar balones fuera sabiendo que nadie es ajeno a lo que está viviendo.

Además, comenta que la población “pensará que tienen a la alcaldesa más mangante de este país”. En la entrevista de media hora con la periodista ‘Sunflower’ no aparecen sus conversaciones con Enrique Ortiz pero Castedo reconoce que ha tenido vergüenza de salir a la calle por lo que pudieran pensar de ella.

“Tengo una hija de trece años que me preguntó por el significado de corrupto”. Para explicárselo, la alcaldesa decidió comparar su situación con Iker Casillas. “En política es como el fútbol. Iker Casillas era el mejor portero del mundo y ahora hay mucha gente que no lo quiere y lo critica. En política, de pronto eres el mejor y de un día para otro dejas de serlo”, explica.

Sonia Castedo cree que está pagando las consecuencias de conseguir el mejor resultado electoral del PP en la ciudad de Alicante y destaca que lo que quiere que quede claro" es su honestidad”. La alcaldesa no confirma si se presentará a la reelección pero está convencida que si deja la política no le faltará trabajo porque asegura: “soy buena en todo lo que hago”.