"Estoy muy preocupada por las informaciones falsas que circulan sobre mí en España" asegura Corinna en la revista Vanity Fair.

La revista, dice que son las amistades más cercanas de la princesa alemana en sus dos cuarteles generales, Londres y Mónaco, quienes confiesan esta situación. Tal es la gravedad, dicen, que Corinna habría decidido incluso actualizar su testamento y poner todos sus documentos de trabajo en un lugar seguro a disposición de sus abogados.

Porque si algo define a la Corinna intermediaria eso es, dicen, la discreción: "no puedo comentar nada más porque tengo firmados contratos de confidencialidad con mis clientes".

Corinna no muestra miedo, pero sí estar incómoda con haberse convertido en una figura mediática, y asegura estar convencida de estar siendo utilizada "en medio de asuntos internos".

Cada día se publican datos nuevos sobre su currículum. Vanity Fair confirma una información que apareció hace casi un año y que, entonces, apenas tuvo repercusión: Corinna diseñó y contrató todos los detalles de la luna de miel de los príncipes de Asturias. Felipe y Letizia disfrutaron de Cuenca y de la sierra de Albarracín antes de irse a paraísos más lejanos.

Y así lo vivió, según palabras de una amiga íntima: "apenas dormía. No se separaba de los dossieres del viaje y estaba muy preocupada de que no se filtrase nada. Nos explicaba después lo complicado que había resultado organizar un viaje así, por todo el mundo, y en contacto con embajadas, sin que trascendiera nada".

Según Vanity Fair, eso sirvió para ganarse la confianza del Rey y así empezó una serie de hasta diez encargos por el bien del país. Hasta el presidente ruso Vladimir Putin, ni más ni menos, habría accedido a recibir al Rey en 2005, cuando España tenía mala relación con Rusia por desencuentros con Ucrania y la retirada de la guerra de Irak. Y todo, gracias a una gestión de Corinna y su empresa, Apollonia Associates, con sede en Malta.

La última misión de la amiga del Rey habría sido a finales del pasado año, cuando ayudó a calmar el enfado de empresarios saudíes con España por dejar de dar primas por las energías renovables. Según Vanity Fair, ese día, Corinna compartió avión oficial con el Rey y la Reina.

Casa Real sigue sin querer hacer declaraciones al respecto. El único que sí ha pronunciado el nombre de moda es el Ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo.