El nombre técnico del gas de la risa es óxido nitroso y es una de las drogas que más se están popularizando en los últimos años en las zonas de ocio. El motivo de su éxito es el precio, cuesta cerca de cinco euros la dósis, una alternativa económica pero realmente peligrosa, algo parecido a esnifar pegamento. "Tiene un efecto mucho más rápido que consiguen de euforio, y de embriaguez que sólo con el alcohol" dice Javier de Francisco, anestesiólogo.
A pesar de la apariencia de diversión, tal y como indica el prospecto es extremadamente perjudicial para los sistemas nervioso y pulmonar, especialmente cuando se mezcla con el alcohol.
En un local de Villanueva de la Cañada, Madrid, lo vendían, por ello la policía ha intervenido 14 cajas, cada una con 700 envases. En total, 9.800 cápsulas de este tipo de gas. El dueño del local proporcionaba globos con gas en su interior.
Durante los últimos años, se han visto más operaciones como esta contra el gas de la risa. Algunos de los detenidos eran británicos, porque en algunos países es totalmente legal.