Todas las mañanas Gloria sale de su casa camino del mercadillo donde se encuentras "algunos de sus hijos" como ella les llama. Exdrogadictos, exalcoholicos y un ingeniero que se ha visto afectado por un desahucio.

Gloria era azafata, y los primeros años salió adelante gracias a su sueldo pero ahora el mercadillo es para todos su medio de vida, cogen muebles de la calle, los restauran y después los venden.

Algunos de sus hijos llevan con ella hasta 14 años, como es el caso de Antonio que no sabía leer ni escribir, ahora se ha sacado el graduado escolar y tiene trabajo, pero cuando Gloria le encontró le daban ocho días de vida.

Dice que pagan más de 1300 euros de alquiler, que la crisis ha disminuido las ventas y también el negocio del mueble antiguos se ha extendido y no consiguen todo el material que quisieran. Temen quedarse en la calle pero por ahora lucharán para seguir adelante como en  estos últimos 15 años.

Todos sus hijos coinciden en lo mismo, Gloria es su madre, su familia, no quieren decepcionarla, y aseguran que si no fuese por ella ahora estarían muertos.