La imputación de la Infanta Cristina dependerá del testimonio de Diego Torres. El principal afectado comparecerá ante el juez Castro el próximo sábado 16 de febrero. Es una de las fechas claves en el desarrollo del caso Urdangarin. De confirmarse la imputación de una persona de la Familia Real, la imagen y el futuro de la institución quedaría gravemente dañada.

Una de las políticas del equipo de la Zarzuela ha consistido en colocar barreras defensivas para intentar dejar fuera del escándalo a la Familia Real. Aunque la imputación de Carlos García Revenga, y sobretodo la eventualidad de que ocurra lo mismo con la Infanta Cristina, muestra que el objetivo está lejos de conseguirse.

Si hubiera imputación, una de las posibilidades es que la Infanta Cristina, séptima en el orden de sucesión de la Corona, decida voluntariamente renunciar a los derechos dinásticos. Precisamente, por petición del Rey, la infanta podría apartarse de la Corona con el argumento de no perjudicar más a la institución ante esta grave situación.