Ciudad del medio ambiente, uno de los más ambiciosos proyectos de innovación tecnológica. Se pretendía que fuera el 'Sillicon Valley' español. En 2010 se colocaba la primera piedra y en 2013 se paralizaban las obras. En la ciudad que iba a tener más de 500 hectáreas, ahora sólo 148, hay una empresa en la zona industrial. Como un fantasma de hormigón blanco, la cúpula de la energía a medio hacer en el llamado sector uno.
Dejó de crecer por culpa de los recortes, aunque se han invertido ya casi 50 millones de euros de los 100 presupuestados, y porque no tenía licencia medioambiental.
"La intención es ponerlo en marcha cuanto antes y que las empresas vengan. Hay ofertas", afirma Manuel López, Delegado territorial de Soria. Tras años de litigios, la Junta ha aprobado un proyecto para poner en marcha de nuevo la ciudad.
"Hasta que no haya una sentencia firme del Tribunal, no hay nada que hacer", asegura Carlos González, presidente ASDEN. Nada, según los ecologistas, porque van a recurrir el proyecto. La zona industrial está terminada a falta de parcelación. El problema está en que es zona protsifa.
Entre recursos y juicios pueden pasar otros 3 o 4 años. Iba a haber hasta 800 viviendas, zonas deportivas todo sostenible y ecológico, sin embargo, ahora hay calles sin asfaltar, pero ya con las canalizaciones, fibra óptica, pero las viviendas ya no forman parte del nuevo proyecto. Por lo que estas obras ya no valen de nada. Aquí estaría obligado el uso del coche eléctrico, 3 garajes también están construidos.
Hasta la posada llegó Ana, la alquiló pensando que habría trabajo con las previsibles miles de personas que vinieran a la ciudad de la energía. Cuatro años después se tiene que marchar. La ruina de unos y casi 50 millones de euros enterrados en medio de Soria.
