Para que negarlo. Se ha pasado casi diez años sorteando flashes, pillada de refilón detrás del Rey... y en cuatro días desbordó berborrea. Como si no tuviera nada que ocultar. Como si no tuviera lado malo: de frente, del derecho o del izquierdo. Corinna se define como una mujer "discreta, profesional y transparente".

Y para evitar, dijo, más complicaciones, esperó a la declaración de Urdangarin. A su manera, evitaba quizás interrupciones en su ronda de titulares. De forma consecutiva, se confesó para el diario El Mundo, la portada de '¡Hola!' y la páginas interiores de 'Paris Match'. La última semana de febrero fue toda una maratón de confesiones.

Corinna quiso dejar claro que es "una amiga entrañable del Rey". Todos han intentado definir su papel, pero hemos tenido que esperar a las entrevistas para rodearlo de mayor misterio. Corinna habla de trabajos "delicados y confidenciales" para el Gobierno de España. El Gobierno ha desmentido el encargo de "tareas" a Corinna.