José Antonio Moral Santín, el hombre de izquierda unida en la corte de Blesa, de 65 años, construyó en torno a los cajeros automáticos su particular monarquía absoluta, llegando a gastar 456.222 euros con su tarjeta black.

Moral Santín se convirtió en el rey del efectivo durante los nueve años de tarjetazos. El 80 % de la cantidad global, más de 360.000 euros, son extracciones de dinero de diferentes cajeros automáticos de toda España.

La estrategia Santín fue ir de menos a más. Durante los primeros años retira 300 euros y poco a poco va aumentando hasta los 600, el máximo permitido, pero lo hace cada día hasta el año 2012.

Especialmente aumenta el ritmo durante periodos vacacionales. Santín adora los paradores o los hoteles balneario donde suelen ir con asiduidad, billetes de avión, de tren, ordenadores, taxis, relojes... Y es en navidades cuando se vuelve especialmente generoso, ya que suele acudir a tiendas y gastarse 600 euros en regalos.

Pero sobre todo un asiduo de los lujos gastronómicos. Cada semana acude entre dos y tres veces durante los 9 años a los mejores restaurantes de Madrid. Nada menos que 400 comidas y cenas donde llega a pagar cuentas de hasta 400 euros.

Santín se ha justificado en su actividad sindical y argumenta que eran comidas relacionadas con los actos donde acudía. El exvicepresidente de Caja Madrid, considerado por Blesa como uno de sus aliados, fue una de las grandes sopresas cuando se descubieron los gastos. Fueron 700 veces las que acudió a sacar dinero durante estos 9 años de desenfreno.