La leña que proviene de un bosque de la iglesia de Solsona, tiene el destino de calentar los hogares de las familias más necesitadas. Víctor, un jubilado que sólo tiene 300 euros para vivir, y que gracias a la campaña 'un invierno sin frío' organizado por el obispado de Solsona, no pasa frío en su casa. "Gracias a esta iniciativa, colaborando con ellos, puedo ir al bosque propiedad del obispado y podemos recoger leña". Víctor no puede pagar la calefacción, ni si quiera la leña necesaria para un mes.

Él y alrededor de 60 personas de Solsona, pueden tener un ambiente acogedor en sus casas. La madera proviene del bosque del obispado, una idea que fue pedida por un vecino de la zona, donde hay mucha gente en paro que no puede pagar la factura.

Recoger las ramas de los pinos, cortarlas, y distribuirlas a las familias, son algunas de las funciones que hacen los voluntarios. Todo para que los demás no pasen frío. Pero tambien la gente que lo está pasando mal participa en la recogida, para después llevársela a casa. 'Un invierno sin frío' lleva quince días solucionando este problema a dieciséis familias de Solsona. Una zona en la que a primera hora cuando aparece el sol, se alcanza una temperatura de seís grados bajo cero.