Franco ha vuelto a Cuenca, concretamente a una calle de la localidad de Reillo. Sus 137 habitantes han tenido que ver cómo los relojes regresaban en el tiempo 70 años y su alcalde le dedicaba la calle principal al Generalísimo.

El alcalde en cuestión es Pablo Campillo, del Partido Popular. Sus motivos, que también hay una calle que se llama Isabel I de Castilla y que, guste o no, Franco también es historia de España. Pues eso, guste o no.

En el municipio, algunos vecinos consideran que se trata de algo "de mala voluntad", e icluso hay quienes que se sienten "defraudados".

Franco tuvo esa misma calle hasta 2008, pero la perdió en favor de José Mondéjar, maestro de escuela del pueblo, alcalde entre 1963 y 1972 y, según el alcalde, también franquista. 

El grupo municipal socialista dice que este cambio vulnera la Ley de Memoria Histórica. Aseguran que, de todas las calles, han ido a quitar la de una de las personas más queridas en el pueblo. 

Mondéjar, como alcalde, construyó el alcantarillado de la localidad, la red de agua, el pavimento de las calles, zonas ajardinadas y una cooperativa. 

Habrá que ver si hay rectificación, pero lo que sí está claro que, en pleno debate sobre la eliminación de símbolos franquistas, las manecillas del reloj de este pueblo de Cuenca han avanzado en sentido contrario.