La retirada de los puntos violeta en las fiesta de Valdemoro ha suscitado una gran polémica debido a la importancia de estas carpas no solo como punto de información sino también como un lugar en el que cualquier persona que haya sufrido una agresión sexual puede denunciar. El consistorio de la localidad madrileña ha sustituido estos puntos por carteles en los que se indica a las personas que sufran una agresión sexual que griten "fuego".

Pablo Montesinos considera que no contar con esos puntos "es una decisión política". "Esto también acarrea unas consecuencias ya que cuando tú retiras un punto violeta les estás diciendo a la sociedad que no es importante, que no es necesario", expone.

"No hay semana en la que no recibimos el mazazo de la violencia machista", añade. "Lanza un mensaje muy nocivo cuando tu retiras por una decisión política un punto de información, de ayuda a unas posibles víctimas", expone. "En política, a veces, rectificar lo aplaude todo el mundo. Y cuando tomas una decisión que debes tomar se rectifica", concluye.