Trabajar 12 horas diarias, tres días a la semana, y jubilarse a los 75 años. Es la propuesta que ha lanzado el empresario mexicano Carlos Slimy que para Gonzalo Bernardos "no tiene ningún sentido".

El economista apunta que "uno de los argumentos para reducir la jornada laboral" es precisamente que "cuando tú llevas siete u ocho horas trabajando casi seguidas, las últimas horas estás muy cansado y tu productividad decrece", por lo que "si las pasamos de ocho a 12, esto aún será peor". "Por lo tanto, no tiene ningún sentido", sentencia.

En cuanto a la idea de jubilarse a los 75 años, Bernardos la critica de forma tajante: "Empresarios que han hecho un gran imperio que hagan estas declaraciones, les deslegitima". "El señor Slim es posiblemente el empresario más importante de América Latina, pero, por favor, los empresarios han de tener una conciencia social", reivindica.

"Esa conciencia social significa que los trabajadores llega un momento en que ya no pueden dar más de sí porque no tienen las mismas condiciones que tenían anteriormente y porque también llega un momento de disfrutar porque para ello han trabajado durante muchos años", incide Bernardos, que no obstante advierte de que "la desgracia que vamos a tener es que como aumenta la esperanza de vida, va a tener que aumentar la edad de jubilación". "Pero por favor, a los 75 ni hablar", zanja.