Uno de los casos nos traslada hasta Almería. El 31 de diciembre de 2015 se produjo un robo en una joyería de la ciudad y dos días después fueron detenidos en Madrid, con parte del botín, dos de los integrantes de la banda de atracadores. Solo faltaba detener al cerebro del robo, que además, hizo uso de su arma para disparar a uno de los joyeros. Se monta entonces 'La operación Vesubio'; un dispositivo policial para atrapar a un conocido delincuente: Pompeyo Miranda Ruiz. Este almeriense cumplió condena en Bolivia por matar a dos personas y tiene un largo historial delictivo.
A continuación, los agentes del Grupo Operativo de Respuesta son alertados por H50 de un local forzado en un barrio madrileño. Los policías llegan al lugar en poco tiempo y comienza la búsqueda de los posibles autores. Tras unos minutos, un hombre agazapado entre unos arbustos es detenido como autor material. La rápida actuación policial ha impedido el robo del bar donde los ladrones se han tenido que dejar herramientas para el robo por su precipitada huida.
Por último, una mujer, tras ser agredida por su pareja en plena calle, llama a los agentes para denunciarlo. Sin embargo, cuando los agentes detienen al supuesto agresor, la víctima se derrumba. Los agentes y una amiga de la mujer tratan de mostrarle que cumple el perfil de mujer agredida que ha creado una dependencia y una sumisión "enfermiza" con su presunto maltratador.
