Malamine Soly, confundador de la Asociación Dunia Kato, y Mariama Badji, secretaria General de la ONG, África Feliz, charlan con Gonzo en Salvados sobre la migración de los jóvenes senegaleses a Europa y, concretamente, a España. La primera vez que Malamine Soly intentó llegar a España no lo consiguió y, afirma, fue visto como un "fracasado".
Más adelante consiguió su objetivo: vivir en nuestro país. Pero al joven casi le cuesta la vida su viaje a España. Por eso, explica que desde su ONG no pide a los jóvenes de Senegal que no intenten buscar un futuro en España, pero les da más opciones: "Yo lo que hago es dar opciones, que me faltaron en su día cuando yo quería emigrar. A lo mejor, si yo hubiera tenido estas opciones, no emigraría".
"Yo estuve a punto de morir en un mar y yo he tenido una pistola en la cabeza. Yo he estado en altamar sin respuesta durante horas y horas y horas y horas. Eso lo tengo que decir, para que la persona, a lo mejor, la opción que tiene, esa opción lo puede barajar con la opción de esos riesgos y que tomen su decisión con libertad", detalla.
"Me tenía que justificar todo el tiempo, 'soy negro y puedo'"
Malamine Soly recuerda su experiencia en España,donde afirma que se tenía que "justificar todo el tiempo": "Para mí mi vida en España era justificarme todo el rato. Que compras un coche, como compra cualquier español, te ven allí y es como, '¡wow, qué coche!'. Es un coche que puede tener cualquier español, pero lo tienen un inmigrante".
Valencia, día uno
La conversación entre el delegado de Bomberos y la alcaldesa de Chiva durante la DANA: "Le llamó llorando; era una debacle"
El presidente de la Diputación de Valencia, Vicent Mompó, recuerda en Salvados la llamada que mantuvo uno de sus compañeros con la regidora, la cual le aseguró que "parecía que se iba a acabar el mundo".