Jordi Évole le enseña a Ricardo Magaz, profesor de la UNED y experto en narcotráfico, unos titulares referentes al comercio de droga. Magaz asegura que “España es la puerta de Europa para la entrada de todo tipo de drogas” porque “somos frontera con África. Dentro de África con el Magreb, y dentro de Magreb, Marruecos, y luego tenemos una relación privilegiada con Latinoamérica. Y todo eso conforma el hecho de que seamos un destino muy apetecible”.
El tipo de droga que más entra en España es “fundamentalmente cocaína y hachís. Ahora mismo se están incautando en torno a 325 toneladas de hachís y unas 21 toneladas de cocaína”, explica el experto en narcotráfico.
El profesor de la UNED comenta que en España, según cifras oficiales, “anualmente el narcotráfico genera 6.000 millones de euros”, muy por delante de trata de blancas con fines sexuales y de un clásico como el tráfico de armas. Magaz explica que “según la ONU, hay 250 millones de personas en el mundo que consumen drogas, sin que eso signifique que todos sean drogodependientes. Con ese caldo de cultivo, obviamente los narcotraficantes tienen el futuro absolutamente asegurado. Estaríamos hablando del crimen sin fronteras”, asegura.
"España es la puerta de Europa para la entrada de todo tipo de drogas"
En el ranking de incautaciones de hachís, España estaría “en el podio”. Y es que “somos líderes sin ningún género de dudas”. Según estadísticas del Ministerio del Interior, Cádiz, que es la provincia en la que se encuentran, es el lugar de España donde más incautaciones de hachís se producen, pero de un modo muy destacado.
El experto explica los dos sistemas que hay para hacer llegar el hachís hasta una provincia como Cádiz: “Uno de ellos es por vía marítima, por pateras, por lanchas y a veces con barcos de recreo. Y la otra es a través de medios de transportes como pueden ser los camiones, otro tipo de transporte por carretera una vez saltado el Estrecho”.
Magaz asegura que la cocaína llega a España normalmente por los puertos y aeropuertos. “En los aeropuertos es por los muleros, una llegada al por menor. Y al por mayor sería por los puertos a través de contenedores". Las formas de esconder la cocaína en los contenedores son dos: “Una es que el narco fleta ese contenedor. Y el otro sistema es lo que llaman el gancho perdido o gancho ciego. Una fórmula que consiste en que en los narcos toman un contenedor, de tal modo que se introducen en ese contenedor de forma furtiva, meten allí la droga, la camuflan en esa mercancía que es legal sin que la empresa dueña de ese contenedor y del contenido sepa que ahí se traslada la droga”.
A nivel nacional, pueden entrar en torno a 44.000 o 45.000 contenedores al día, una cifra donde el índice de poder revisarlos es mínimo; por tanto, “sólo se revisan aquellos sobre los que hay sospechas previas, aquellos que vienen por rutas calientes o aquellos en los que hay confidencias, chivatazos, porque las bandas y los cárteles del narcotráfico se chivatean”, asegura.