" La migración es uno de los grandes temas y lo que está alimentando el auge de la extrema derecha", afirma José María Beneyto, director del Instituto de Estudios Europeos, que asegura que la política de puertas abiertas de Merkel "alimentó que se creara Alternativa para Alemania". "No creo que podamos adoptar medidas buenistas que a todos nos gustaría, pero hay que ver que no genere desequilibrios", sostiene.

Para parar la inmigración, algunos partidos de extrema derecha no sólo quieren cerrar las fronteras exteriores, también prometen recuperar las interiores. Como la francesa Marine Le Pen, que ha prometido acabar con el territorio Schengen, si bien la profesora de Estudios Internacionales, Paula Lamosa, no cree que se le permitiera "porque trae consecuencias económicas". 

En la Unión Europea volverían las fronteras internas para las personas, pero también para los productos. Es lo que defiende también Le Pen bajo el concepto 'soberanía alimentaria francesa' frente a nuestra agricultura, a la que considera invasora. Políticas nacionalistas que chocan con los intereses de los agricultores españoles que exportan sus productos a Francia y, a pesar de eso, Le Pen ha sido una invitada de honor en la campaña de Vox para estas elecciones europeas.