En la Unión Europea conviven culturas muy diferentes, como si se tratara de la aldea de 'Astérix el Galo'. Un colorido universo plurinacional donde se lleva compartir costumbres y unos 'traguitos' de esa 'poción mágica' llamada fondos europeos con los que ayudar a quien lo necesita. "Es mucho dinero que va a las empresas, a los ciudadanos", señala el director de Instituto de Estudios Europeos, José María Beneyto.
En esa Europa 'a lo Astérix', las barreras nacionales se difuminan con entendimiento en una mesa redonda que aquí es el Parlamento Europeo, donde el "gran amalgama de partidos políticos tienen que ponerse de acuerdo", apunta Paula Lamoso, profesora de Estudios Internacionales de la Universidad Loyola, en el vídeo sobre estas líneas.
En Europa, el acuerdo no siempre llega, pero ahora el consenso es más difícil por políticos antieuropeístas como Viktor Orbán. También hay peligros externos, a los que Europa, unida, elige cómo combatir, como en el caso de las multinacionales, frente a las que Europa intenta protegernos.
"Sobre todo las nuevas generaciones o las generaciones que hemos nacido ya dentro de la Unión Europea tendemos a darla por supuesto, y además muchas veces actúa como ese ente que tú no sabes que está ahí y que te protege y te da muchos beneficios que no eres consciente de ello", apunta Lamoso.