Ignacio Arsuaga entraba en laSexta Noche con el propósito de hacerse oír: "Un médico al nacer un niño dice que es hombre si tiene pene y es niña si tiene vulva". Repite el mensaje tránsfobo del autobús de la discordia, un vehículo inmovilizado por orden judicial al entender que hay indicios de menosprecio hacia las personas trans.
"Estos mensajes como los de Hazte Oír que les niegan la existencia rotundamente tienen repercusiones psicológicas como depresión, ansiedad, e intentos de suicidio" , explica Ana Prieto, psicóloga de la fundación Daniela.
Anque pide disculpas a quienes se hayan sentido ofendidos, Arsuaga se reafirma: "La OMS dice que la disforia de género, otra forma de llamar la transexualidad, es un patología". La transexualidad una patología y los heterosexuales discriminados, según él. "Nos vemos discriminados cuando efectivamente se crean derechos especiales, por ejemplo: el derecho a imponer que en la escuela se enseñe la ideología de género a todos los niños", responde.
Los datos son otros: según la Agencia de la UE por los Derechos Fundamentales, cinco de cada diez europeos trans han sufrido discriminación. Seis de cada diez han sido víctimas de acoso y el 8% reconoce haber sido agredido por ser trans.
Arsuaga ha sido noticia por el altercado en la Universidad Complutense. El debate en el que iba a participar no estaba aprobado y aún así, se presentó con un bus: "Una asociación de estudiantes me invita, no sé si luego el permiso lo pidió un estudiante individual".
El decano de la facultad de Derecho de la Complutense ya lo dejaba claro. Ricardo Alonso afirmaba que tienen "la regla de sólo atender peticiones que proceden de asociaciones de estudiantes legalmente inscritas".
No obstante, el presidente de Hazte Oír argumenta que su única intención era hacer un debate sobre la libertad de expresión.
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