Miguel Ángel Santos es un trabajador autónomo que vive de alquiler en un piso junto a su familia por el que pagaba 750 euros mensualmente. Hace seis meses comenzó a recibir llamadas de su casero, quien le proponía comprar el piso o hacer un alquiler nuevo con opción a compra, según ha relatado en laSexta Xplica.

Las presiones no cesaban, pero él y su mujer decidieron negarse. Sin embargo, hace un mes y medio el casero reapareció exigiéndoles hacer un nuevo contrato. "Tenía que ser antes de que entrara en vigor la nueva Ley de Vivienda o nos íbamos a la calle", ha explicado.

"Nos vimos en la situación de renovar este contrato forzosamente, porque si no, nos veíamos debajo de un puente en marzo", ha explicado. Finalmente tuvieron que aceptar esas nuevas condiciones con el incremento que suponía: 300 euros. Puedes conocer la historia completa consultando el vídeo ubicado sobre estas líneas.