M. Night Shyamalan ha estrenado recientemente su última película, 'La trampa'. "Siempre rueda pelis que hacen que nos mordamos las uñas y que nos quedemos sin aliento de la tensión", cuenta Miki Nadal. Josh Hartnett, su protagonista, encarna a un asesino en serie que va con su hija a un concierto pero descubre que todo es una trampa para atraparle.

Alberto Rey, que ya ha podido verla, afirma que, aunque no le ha gustado demasiado afirma que "no hablo de otra cosa desde entonces". "La peli ha tenido críticas muy variadas porque la primera mitad funciona muy bien, es un thriller psicológico que recuerda al cine clásico pero luego se va al traste porque intenta hacer giro tras giro... es todo loquísimo", explica Alberto.

"Es lo que esperamos de Shyamalan, es el director de los giros", añade. Para el periodista, lo que la hace diferente es que Josh Hartnett es claramente el villano, por que es un asesino en serie, "te pones de su lado". "La que canta en el concierto de la película, una especie de Taylor Swift, es la propia hija de Shyamalan", comenta.

Aunque la premisa que presenta la película parece muy loca, en Estados Unidos ocurrió algo parecido. Como explica Alberto, "regalaron entradas para un partido de fútbol americano y alguna les tocaron a unos delincuentes y, cuando entraron en el estadio, los detuvieron".