El SIBO es un problema digestivo que se produce cuando hay un aumento anormal de bacterias en el intestino delgado y Boticaria García asegura que diagnosticarlo es muy difícil, incluso para los propios médicos.

Por este motivo, destaca que es importante que haya "un diagnóstico diferencial con otras enfermedades que dan lugar a confusión", como la celiaquía, la enfermedad inflamatoria intestinal o el síndrome de intestino irritable. "No todo es SIBO, hay problemas digestivos que no implican sufrirlo", sostiene.

¿Tiene tratamiento? La experta indica que la solución es el antibiótico, aunque si no se diagnostica correctamente, usarlo sin necesidad puede convertirse en el problema, pues "se carga a la microbiota buena y es peor el remedio que la enfermedad", declara. De ahí que incida en la importancia de no autodiagnosticarse y actuar siempre bajo las pautas que indiquen de los médicos.