"Todos hemos tenido disputas con algún vecino, pero lo que ha pasado en Richmond, Reino Unido, yo no lo había visto nunca", ha comentado Dani Mateo justo antes de contar que un hombre ha instalado un maniquí en su buhardilla frente al dormitorio de sus vecinos "con el único objetivo de que se sientan observados y duerman mal".

Así es como se ha querido vengar el hombre de sus vecinos, después de que estos se quejaran de había construido una ventana, por lo que perdían intimidad. El caso ha llegado incluso a la Justicia, después de que la pareja denunciase al vecino por instalar el maniquí. Sin embargo, tras dos juicios, el juez ha dictaminado que no puede hacer nada por ellos y que su vecino puede poner en la ventana lo que quiera.