La ciudad de Nottingham, en Reino Unido, tiene un nuevo héroe. Se llama Essa Khan, tiene cuatro años y sufre dificultades en el habla. Esta semana estaba en casa jugando cuando su madre se dio un golpe en la cabeza y cayó inconsciente al suelo.
Pese a ser tan pequeño, Essa no se puso nervioso y gracias a su coche de juguete, que tenía inscritos los números '999', pudo llamar a la Policía para pedir ayuda. Pese a sus dificultades para expresarse, el niño pudo pronunciar las palabras clave para que la Policía entendiese lo que había ocurrido. Una vez en el domicilio, el menor le pasó las llaves a los agentes por el buzón para que pudieran entrar a ayudar a su madre.