Un niño de Singapur se ha convertido en el más rápido en resolver un dado de Rubik de dos caras. A este logro hay que sumar la manera en que lo ha conseguido, ya que mientras resolvía el puzle con una mano con la otra hacía malabares. No te pierdas el hito en el vídeo principal.
El pequeño ha entrado así en el Libro Guinness de los récords al haberlo conseguido en tan solo 10,43 segundos. "La de tiempo que le habrá llevado hacer eso", afirma Cristina Pedroche. "Como maneje así las manos este niño, cuando sea un poco más mayor no le vais a ver el pelo", comenta Quique Peinado.