Sucesos

Paco Jiménez cuenta la historia de Margarita, una mujer que viajaba a Londres solo para robar bolsos de lujo

La señora robo, en solo dos viajes, cuatro bolsos: un Hermès, un Valentino, un Chanel y un Yves Saint Laurent. Finalmente, fue cazada con las manos en la masa después de robar un bolso Gucci y unas gafas.

La señora robo, en solo dos viajes, cuatro bolsos: un Hermès, un Valentino, un Chanel y un Yves Saint Laurent. Finalmente, fue cazada con las manos en la masa después de robar un bolso Gucci y unas gafas.

Paco Jiménez visita Zapeando para hablar sobre una mujer española que consiguió robar varios bolsos de lujo por valor de más de 20.000 euros en Harrods, unos populares grandes almacenes situados en Londres. Como explica el periodista, Margarita del Carmen, que así se llama la ladrona, "es una mujer de 38 años, con cinco hijos y natural de Las Palmas de Gran Canaria".

La señora viajó en tres ocasiones a Londres para llevarse esos complementos. "El primero bolso fue un Hermès de 2.474 euros y fue vista llevándose el bolso pero ella se las apañó para salir de los almacenes", explica Jiménez. "Metedlos en una caja, como la ginebra en el supermercado", sugiere Quique Peinado a los almacenes londinenses. Como el robo fue exitoso, a los tres días volvió al mismo establecimiento y se llevo un bolso Valentino de 2.800 euros.

Margarita del Carmen volvió a España con sus nuevos bolso y, "viendo el éxito que había tenido y la impunidad tan grande con la que había conseguido llevarse esos bolsos, volvió cuatro meses", explica Paco. En esta ocasión se llevó primero un bolso Chanel de 6.093 euros y después un Yves Saint Laurent de 3.360 euros.

En su tercer, y último viaje, la ladrona tenía un objetivo más ambicioso: conseguir un bolso Gucci y unas gafas, por valor de 8.000 euros. En esta ocasión, el personal de seguridad la vio y comenzó una persecución por las calles de Londres. Cuando la atraparon, descubrieron que en su bolso tenía un desetiquetador eléctrico y unos alicates para quitar las alarmas. La mujer fue condenada a seis meses y, como explica Jiménez, la señora estaba aliviada por haber sido cazada porque sino habría sido peor.