"Antes viajar era una cosa muy guay, elegante, sofisticada...", afirma Isabel Forner. "Pero ahora es horrible", añade, "y no solo porque hay gente que bebe como si lo fuesen a prohibir, también te puede tocar al lado una señora que, de pronto, decide hacer sus necesidades en mitad del pasillo del avión".

Como se puede ver en las imágenes, la señora pide disculpas al resto de pasajeros y, ante el estupor de todos, se baja los pantalones y se pone en cuclillas. Las personas a su alrededor se quedan alucinadas. "Nos parece una cerdada", afirma Isabel, "lo mismo la señora solo estaba marcando su territorio".

"A ver, es muy educada, pide perdón a todo el mundo", apunta Dani Mateo. "El 'caganer' del Belén Viviente se nos ha ido de las manos", añade Quique Peinado. "Una personas que puede hacer pis o caca en un avión con un avión entero mirándola... me merece todo el respeto", afirma Miki Nadal.