Un chico decide ponerle una cámara a su gato en el collar para descubrir qué hacía el animal durante sus paseos por el barrio. Pero lo que seguro no se esperaba descubrir es que el minino, en realidad, era el macarra de la zona.

Como se puede ver en las imágenes, el gato se cruzó con otro minino y esto provocó un festival de maullidos y gruñidos amenazantes entre ambos. Pero, no contento con cantarle las 40 a su 'amigo', comienza a perseguirle a toda velocidad cruzando setos, parques y aparcamientos.

"De estas impactantes imágenes podemos sacar dos conclusiones: que ágiles son los gatos y qué macarra es el gato este", comenta Quique Peinado. "Es una auténtica escena de persecución de peli de acción, podría titularse 'Cat and Furious 6'", añade Iñaki Urrutia.