Una de las atracciones más conocidas del Parque de Atracciones de Madrid son las sillas voladoras. Y, como cuenta Torito, durante un viaje de fin de curso vivió un momento muy asqueroso por culpa de esta atracción. "Cuando vine de viaje estábamos mirando la atracción y nos cayó un vómito", cuenta el colaborador.

"Imagínate, los cuatro que no habíamos salido de Menorca, llegamos a Madrid y vimos confit de pato", añade Torito, provocando las risas de sus compañeros. "Así empezamos el viaje de fin de curso", cuenta, "y después me llevaron al Valle de los Caídos".

"Y de ahí se le ha quedado ese pelo", comenta Eugeni Alemany. "Vaya fin de semana bueno en Madrid, eh...", afirma Miki Nadal, irónico. No te pierdas la anécdota en el vídeo principal.