Uno de los problemas a los que se enfrentan los dueños de animales son los celos de sus mascotas. Pero, ¿es posible que sientan celos? El veterinario Víctor Algra explica que hay estudios científicos que determinan que las mascotas pueden tener comportamientos celosos.
"Un estudio muy famoso de la Universidad de San Diego se basó en 36 perros", indica Víctor. Para llevarlo a cabo, se enfrentó a los canes a tres situaciones: que sus dueños les ignoraran y acariciaran a un perro de peluche que hacía sonidos, a una calabaza de Halloween o que leyeran un cuento infantil que también tenía sonidos.
El estudio determinó que, en el caso del peluche, el 80% de los perros trató de acercarse a sus dueños e, incluso, les empujaban. En cuanto a la calabaza y el libro, los porcentajes eran menores. "El 30% trató de interponerse entre el peluche y el dueño y un 25% directamente ladró y mostró agresividad", expone Víctor, "solo un perro lo hizo con la calabaza y el libro".
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Con eso resultados, el experimento concluyó que los perros no solo demostraban celos sino que también intentaban romper ese vínculo que tenían sus dueños con los rivales. "Los celos surgen cuando sienten esa necesidad de proteger nuestra relación con ellos", concluye Algra.
