Cuando agentes de la Guardia Civil registraban la vivienda de la familia de Antonio Anglés, en busca de pruebas que pudiesen ligarlo con la desaparición de las tres niñas de Alcàsser sonó el teléfono. Los agentes escucharon atentos una llamada que dejaba muchas incógnitas por resolver.
"Kelly, soy yo, Rubén. Cuando venga, le dices al 'El Rubio' que vaya donde está el plato y la maneta de la moto. Que traiga los dos sacos de dormir y los Kellogg's y la leche que hay encima de la nevera. ¿Sabes?, lo antes posible".
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Eso es lo que se escuchó al otro lado del teléfono y que el exsargento de la Guardia Civil José Moreno Alegre aún recuerda bien: "Se comunicaba de una forma como ocultando datos", explica en la docuserie 'Anglés: Historia de una fuga'.
Así fue el registro de la Guardia Civil en el piso de Antonio Anglés: "No hubo alteración hasta que llegó Miguel Ricart"
El sargento de la Guardia Civil que registró la casa de la familia Anglés en busca de una pista sobre el triple asesinato de Alcàsser narra en la docuserie 'Anglés: Historia de una fuga' cómo fueron esos momentos.