De hecho, la única persona con quien mantiene un vínculo hasta que se planta en su vida Merlí, el nuevo profesor de Filosofía del instituto. Los especialistas le han diagnosticado un principio de agorafobia, pero él no quiere hablar con psicólogos.
Se siente decepcionado y completamente desconectado de la sociedad que la ha rodeado hasta ahora. No se cambia mucho de ropa, no se corta el pelo, no limpia lo que ensucia, no quiere saber nada de nadie. En clase era considerado un friki.