Tino Casal no solo deslumbraba a periodistas o personas del mundo del espectáculo, también fue inspiración para los artistas de su época. Para Ramoncín fue un precursor, y para Fortu de 'Obus' fue mucho según cuenta él mismo. "Para mí Tino ha sido un maestro, he aprendido con él muchísimo, lo que sé de partitura, de composición, del estudio de grabación...", explica el cantante.

Tino dio a la industria musical y artística de la España de la Transición mucho empuje. "Era una cabeza de león detrás de la que muchos iban", cuenta Javier Losada, un músico que trabajó con él. "Alaska venía a casa de Tino a ver qué ropa íbamos a utilizar en la siguiente gira para tener una tendencia de por dónde iban a ir las cosas", recuerda el músico, que afirma que el artista asturiano siempre iba adelantado a la sociedad.

Otro artista asturiano, pero muy diferente a Tino, Víctor Manuel, también lo recuerda con admiración. "Era un cantante excepcional, cantaba mejor que el común de los que estábamos moviéndonos por allí", recuerda el cantante, que opina que "mamó algo en algún sitio que le dio esa manera de ser, de comportarse, de cantar y de componer que era diferente a todos los demás".